PRESENTACIÓN DE NUESTRA DELEGACIÓN DIOCESANA PARA LA FORMACIÓN TEOLÓGICA
Por lo general, nuestra colaboración en la revista diocesana La LUZ Digital, Escritorio Anglicano, se ha limitado a ciertos artículos de índole bíblica y algún que otro comentario sobre realidades actuales que llaman la atención de los medios cristianos o suscitan cierto interés en ellos. Y así pensábamos hacer esta semana también, pero algo nos ha hecho cambiar de idea. Recibíamos un par de días atrás un mensaje en nuestro correo particular en el que, entre otras cosas, se nos formulaba esta pregunta: “¿cuáles son las funciones o las competencias de la Delegación Diocesana de la I.E.R.E. para la Formación Teológica?”
Comprendimos que no se trataba de un asunto sin importancia. Al contrario, era algo que se debía responder con total exactitud. Escribimos a quien nos había enviado el mensaje en cuestión y le remitimos a esta nuestra revista digital, indicándole que procuraríamos dar en ella cumplida satisfacción a su más que lógico interrogante. De hecho, nos consta que hay bastantes hermanos y bastantes parroquias a nivel nacional que ignoran la existencia y las competencias de esta Delegación Diocesana.
Pasamos, pues, a detallarlo de forma clara y sencilla.
Como su nombre indica, a esta Delegación compete la tarea de velar por que nuestros ministros y miembros laicos sean poseedores de unos conocimientos básicos sobre cuanto se refiere a cuestiones relacionadas con nuestras creencias y su fundamentación. Asimismo, es responsabilidad de esta Delegación proveer los medios adecuados, siempre con el visto bueno de la autoridad de la Iglesia, para que esos conocimientos se acrecienten conforme a las necesidades de nuestra denominación y el deseo de quienes quieran acceder a ellos.
En estos momentos, son tres las áreas básicas en las que estamos trabajando, bien para continuar lo que ya se había hecho, bien para consolidar nuevas áreas, bien para abrir otras nuevas. Las exponemos a continuación:
Curso de formación de Lectores Seglares. Tiene como finalidad la preparación de miembros laicos que colaboren y ayuden a los pastores ordenados en la liturgia de la Iglesia, la predicación y otras tareas adjuntas. En la I.E.R.E. el lector seglar es una figura que reviste mayor importancia que en otras diócesis y otros países. Debido a factores históricos del siglo pasado, muchas de nuestras parroquias y puntos de misión que sobrevivieron a la Guerra Civil Española, durante largo tiempo fueron, en realidad, dirigidas y literalmente pastoreadas por lectores seglares, dada la escasez de clérigos ordenados y las dificultades inherentes al régimen político de España a la sazón, que no permitía un contacto directo con diócesis anglicanas extranjeras. En la actualidad, siguen siendo lectores seglares algunos de los hermanos que llevan adelante ciertas parroquias de nuestra diócesis, pues constituyen una ayuda inestimable para los clérigos ordenados. De ahí que el curso, totalmente gratuito y con materiales provistos por la propia Delegación Diocesana, incluya asuntos tan variados como la historia de la denominación, cuestiones teológicas diversas, fundamentación en la Sagrada Escritura, los Sacramentos o el arte de predicar, entre otros. En estos momentos, son bastantes los hermanos laicos que siguen este curso y esperamos que su vocación de ayuda al Sagrado Ministerio sea un día plasmada en la realidad de sus parroquias respectivas. Desde hace muy poco tiempo, un acuerdo con el Centro de Investigaciones Bíblicas (C.E.I.B.I.), prestigiosa institución de formación ministerial protestante de nuestro país, permite a los estudiantes de este curso de formación de lectorado seglar, si lo desean, optar a un diploma acreditativo expedido por esta institución, que reconoce el curso como una herramienta de buena calidad para la formación laica.
Centro de Estudios Anglicanos (C.E.A.). Hacía ya mucho que la I.E.R.E. sentía la necesidad de una institución académica propia que formara sus clérigos. Lo cierto es que los clérigos actuales hemos estudiado en diversas instituciones españolas o extranjeras, pero no siempre en un seminario nuestro, con nuestras características distintivas y nuestra identidad histórica, teológica y litúrgica. Algunos, como el que suscribe, hemos debido aprender por nuestra cuenta lo referente a la idiosincrasia propia del anglicanismo y del anglicanismo español en concreto, lo cual no siempre ha resultado fácil ni cómodo. A fin de dar por concluida esta etapa, la I.E.R.E. dio el visto bueno a la creación del Centro de Estudios Anglicanos o C.E.A. por sus siglas, que a día de hoy tiene ya su programa de estudios a distancia con sus profesores-responsables de las distintas asignaturas. Asuntos puramente técnicos, como la cuestión de la página web de la I.E.R.E., donde aparece con toda la información pertinente y los requisitos necesarios para matricularse y comenzar a estudiar en él, han retrasado más de lo previsto su funcionamiento, pero todos deben saber que ya existe y que, con la ayuda de Dios, muy pronto estará impartiendo sus materias y formando a nuestros futuros ministros, o reciclando a aquellos que, ya en activo, deseen ponerse al día en ciertos temas. En este sentido, el C.E.A. tiene, entre sus actividades, la formación permanente de los clérigos y los dirigentes laicos en los retiros ad hoc organizados por la Oficina Diocesana, cosas de las cuales cada parroquia irá recibiendo las notificaciones pertinentes. El C.E.I.B.I. antes mencionado también reconoce el plan de estudios del C.E.A., acreditando para cuantos estudiantes lo deseen el diploma de grado correspondiente.
Formación permanente de la Iglesia. Tal vez sea esta la faceta menos conocida de la Delegación Diocesana para la Formación Teológica, pero no por ello la menos importante ni la más descuidada. Vivimos en una sociedad en la que la información es necesaria, máxime cuando la avalancha de información puede muy bien generar desinformación a todos los niveles. En lo referente a las parroquias y puntos de misión de nuestro país, pueden suscitarse asuntos que requieran una exposición o un estudio detallado que convide a unas sesiones especiales. Son muchas las preguntas que se generan en el estudio de la Santa Biblia o en temas de índole histórica o de otras áreas, y que requieren respuestas claras. No hay que olvidar que, por desgracia, vivimos en estos tiempos una verdadera avalancha de ideas extrañas, incluso en el ámbito religioso, procedente de Ultramar, que, so capa de piedad o fidelidad a las Sagradas Escrituras, pueden estar vehiculando en realidad filosofías diametralmente opuestas al espíritu y la misión del Cristianismo, al mismo tiempo que fomentar actitudes claramente sectarias y antisociales propias de grupos que nunca han formado parte de la Iglesia universal de Cristo. Ninguna parroquia de nuestra denominación ha de quedar sin información sobre asuntos de importancia vital para el mantenimiento de la fe cristiana genuina; la Delegación Diocesana para la Formación Teológica está ahí precisamente para atender a las congregaciones en este sentido.
No quisiéramos concluir esta exposición sin aludir, como de pasada, a algo que es también fundamental: la Relación de la Delegación Diocesana para la Formación Teológica con otras Delegaciones Diocesanas. Ninguna de las delegaciones diocesanas es un compartimento estanco. Al contrario, todas se interpenetran en sus funciones respectivas, de modo que todas ellas pueden resumir su actuación con una sola palabra: SERVICIO, al Señor, a la Iglesia, a la sociedad. Estamos siempre en contacto unos con otros y elaborando planes de actuación conjunta en aquello que tengamos algo que ofrecer. Es cierto que “las cosas de palacio van despacio”, como dice el conocido refrán español, pero van, aunque sea poco a poco, pues la vocación de servicio que nos alienta es algo firme y genuino.
Dios bendiga a nuestra Iglesia Española Reformada Episcopal, a la Comunión Anglicana mundial, a toda la Cristiandad y a toda nuestra gran familia humana en el amor de Cristo Jesús, nuestro Señor y Salvador.
A Él la Gloria por los siglos de los siglos.
Rvdo. Dr. Juan María Tellería Larrañaga
Presbítero ordenado de la I.E.R.E.
Delegado Diocesano para la Formación Teológica
Decano Académico del C.E.A.
Decano Académico del C.E.I.B.I.